Días grises princesa VI

Capítulo seis... Seguramente, cuando me aconsejaban que pasara página, no se referían exactamente a esto.
Día 25 de Octubre.
No empezaba del todo mal, agujetas físicas, pero al menos pocas agujetas psicológicas. Un poco de ejercicio en el gimnasio, el placer de salir del Spá y que te de aire fresquito de una noche nublada a las 9 de la noche no tiene comparación.
Cenar y comenzar a leer un libro empezado, pero... demasiadas distracciones y poca concentración.
Mejor una película, recomendación de ella. No sé si era por las horas o porque realmente no era lo que me esperaba ver pero... Uff, qué película más pesada y empalagosa, se premeditaba el final desde el minuto 20.
(Seguramente sea porque no la he entendido y sea una película maravillosa... Respetos.)

Tenía mis teorías de porque me obviaban por el móvil el Miércoles, después de leer algunas "confesiones" me dí cuenta que no estaba equivocado. Y volviendo al punto de retorno por sexta vez... ¿Por qué me importa? Supongo que por la misma razón que me altero cuando oigo su nombre, me encuentro viejos amigos suyos por Madrid que me relacionan con ella, veo pasar el C57, veo su antiguo colegio, paso inevitablemente por su parada de metro para ir a Madrid, o aparece en el reproductor  "Flightless Bird".

El caso es que siempre acaba apareciendo su rostro, como si de un videoclip se tratara, me evado con mis cascos como cada mañana mientras van apareciendo imágenes difuminadas y confusas, recuerdos que hacía tiempo que no daba vida en mi cabeza. Ya no sé si soy yo el controlo mis recuerdos o son mis recuerdos los que me controlan a mí.
Cierro los ojos y veo fuego, nuestros rostros ardiendo por un ataque irracional de rabia... veo hielo, patinando como patos... veo sonrisas, ella viendo a su fan número uno en el cine al lado de la que fue su mejor amiga... veo confusión, volver de París e intuir que tout c'est fini, y era cierto.

Y a día de hoy... no hay que ser un experto para saber que soy un estorbo en su vida, me alejaré de todos los medios posibles. Absolutamente todos será imposible. Aunque lo sé, seguiré haciendo lo posible para saber de ella y en un tiempo acabaré regresando, lo sé. La quiero. No como un novio a su novia o un amigo a su amiga... no es ni algo más ni algo menos. Solamente sé que siempre regresa.

La última.